Lugares que dan miedo: Belchite
Igual que hablabamos hace unos días de los lugares que nos gustaría visitar, hoy os dejo un lugar al que no me gustaría ir pues es considerada como la meca para las psicofonías, y toda persona a la que le dan miedo estas cosas debería evitar pisar este sitio.
Belchite esta situado en la provincia de Zaragoza, rodeado de muros de estilo mudejar cuenta con dos conventos y varias Iglesias, coo cualquier otro pueblo y hasta ahí todo normal, pero las historias y leyendas van más allá.
Los primeros ocupantes de Belchite son de la época romana que dejaron su huella en ese lugar y su historia, más tarde los musulmanes también aportaron lo suyo, hasta que en la reconquista y por Felipe II, esta ciudad pasó a manos del conde de Belchite.
En sus calles se vivieron numerosas batallas y contiendas dejando regueros de sangre en sus calles, nada raro en la guerra, pero si, cuando se piensa que este pueblo esta maldito y más todavía cuando durante la guerra civil alrededor de unas 6000 personas pierden la vida en sus calles, y casi todas las viviendas son destruidas. Unos años después, Franco ganaba la guerra y les decía a los habitantes de Belchite: “Yo os juro, que sobre estas ruinas de Belchite, se edificará una ciudad hermosa y amplia como homenaje a su heroísmo sin par." Franco (1.937-1.954). Esta nueva ciudad fue construida por prisioneros de guerra. Claro que, las casas se pusieron en venta y de ese modo el pueblo quedó abandonado en la historia pues muchos de sus habitantes ya se habían trasladado de lugar, para no volver.
Cuenta la leyenda que todas las personas que murieron en sus calles pasean libremente por ellas y su alma descansa entre los vivos, las psicofonías lo demuestran y numerosos investigadores de lo paranormal pasan sus noches en las ruinas de las catedrales, en sus calles, en sus conventos para demostrar que esta teoría es cierta. Pasar allí una noche puede ser un buen presagio de que algo te ocurrirá, oirás gritos, lamentos, bombas, veras sombras que se internan y se esconden al paso de los visitantes, puertas que se abren, arañazos en las tiendas de campaña de los que se atreven a dormir allí,
Ostin yo no duermo ni loca estuviera ni jarta de güiski como se diria por mi tierra
ResponderEliminarOstin yo no duermo ni loca estuviera ni jarta de güiski como se diria por mi tierra
ResponderEliminarUy que miedo les mando un beso
ResponderEliminarCiertamente un lugar maldito...
ResponderEliminarSaludos
Para ir solamente de pasada, pero sin quedarse de noche! Muy interesante, no sabía que existía un lugar así. Besos.
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