¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS PIRUJA!!!!!!!!!!!!!! La brujita buena

Este cuentecito, no vino al blog por casualidad, fue gracias al aviso de Jolie, un nuevo miembro del blog, amigo de Piruja, que nos aviso ayer por la noche, de que era su cumple... Y bueno, no hemos querido dejar de darla una sorpresilla... Así que, Piruja, esperamos que te guste nuestro humilde regalo. 

Cuenta la leyenda, que en un país encantado, nació una brujita que no era como las demás, esta, no nació cuando un rayo surco los cielos, sino, cuando el mismísimo arco iris brillaba alto en el cielo.

Su madre supo, que ella iba a ser una niña muy especial, y la llamaron Piruja.

Piruja creció y vivió muy feliz, cuando otros rompían algo, ella lo arreglaba, si el cielo lo tornaban oscuro, ella lo alegraba... Todas las brujas de la comarca la tenían envidia, el arco iris parecía brillar en su interior con la misma fuerza que brillaba el día que nació.

No importaba las cosas malas que siempre hubiera a su alrededor, ella, siempre las volvía alegres, si una flor se marchitaba, ella la ayudaba a crecer, tenía el poder de la sanación, pero no una sanación cualquiera, sino la sanación de las almas.

Pero, no todo iba a ser feliz en esa comarca, cuando hay envidias, es lo que pasa...

Un día, mientras la brujita Piruja caminaba por su verde campo, los pájaros la acompañaban y cantaban a su alrededor, oyó un ruido, y al volverse, allí lo vio, un alma, dos, tres, que salían a su encuentro para pedirles ayuda.

No eran almas cualquiera, eran almas humanas, almas de niños a lo que ella alegraba cada tarde al pasar por sus bosques y volverlo todo de colores.

Piruja estaba sorprendida, no sabía de donde habían salido, pero si, que ahora entendía, como a veces cuando se paraba a beber de los riachuelos, podía notar como más de un par de ojos la observaban.

Jamás le había dado importancia, seguramente serían sus hermanas de brujería, que envidiosas de que la luz no dejara de brillar a su alrededor, buscaban el modo de incordiarlas.

Pero esta vez, todo era diferente, ahora entendía lo que estaba ocurriendo, había almas humanas en ese bosque, almas de niños que sin ellas decirles nada y aun sintiendo miedo de que la hicieran daño, comenzaron a acercarse y se sentaron a su alrededor.

Piruja, no sabía que decir, ni que hacer, la estaban rodeando, así que saco su mini escoba, que en un abrir y cerrar de ojos se hizo enorme, pensaba escapar de allí volando, tan lejos como fuera posible.

• ¿Dónde vas hermosa bruja?- la dijo un niño intrigado.
• Lejos de aquí- dijo Piruja.
• Puedes defenderte de nosotros con tu magia- dijo otro.
• Aunque tenga miedo de vosotros, jamás haría daño a un alma inocente.
• No queremos hacerte daño- aventuró una niña con coletas que permanecía sentada cerca de una piedra.
• ¿Entonces?- Esta vez Piruja si que estaba sorprendida.
• Venimos a que nos cuentes...
• ¿Os cuente?- Preguntó esta vez incrédula.
• La historia- dijo una pequeña niña apartándose los cabellos sucios del rostro.
• No entiendo nada- se volvió Piruja dispuesta a marcharse.
• Ellos dicen que eres una reina.
• ¿Ellos?- Esta vez los pequeños si habían captado su atención.
• Los elfos, las hadas, los animales, el sol... Todos lo dicen- habló el que parecía ser el más pequeño del grupo.
• Ellos se equivocan- contestó Piruja sin pensar y preparo su escoba para marcharse de allí- Debía estar volviéndose loca.
• Ellos dicen que hubo una vez un hada mágica, que huía de su captor, y creyendo que lo había despistado, paro a descansar frente a un arroyo. De repente, vino una gran tormenta, y la ninfa despertó, a su lado, el origen del mal estaba, y todo se volvió oscuro. El hada, temerosa de que algo pudiera pasarle a su pequeña a la que llevaba en el vientre, hizo un último esfuerzo y la mando lejos, tan lejos donde la magia la permitía.
• Prosigue- Pidió Piruja.
• Con tan mala suerte- continuó otro de los niños- que el bebe fue a parar a la comarca de las brujas, pero no a cualquier bruja, el arco iris se encargó, de que fuera una bruja buena y bondadosa, allí, un 12 de Junio, nació una niña, el hada de los bosques, cuyo resplandor, pondrá fin al sufrimiento de los que están a su alrededor.
• ¿Entonces?- Dijo Piruja- ¿Qué queréis que os cuente yo?- Pregunto asombrada de semejante cuento.
• Queremos que nos cuentes, como alguien, que nació de un hada, fue capaz de llegar al país de los humanos con todos sus poderes.
• ¿Sus poderes?- Dijo Piruja casi sin poder hablar.
• Si- contestó el más mayor- El poder de iluminar, todo cuanto toca.

Y bueno, Piruja, aun esperamos que nos cuentes cual es el secreto de semejante poder jejejeje, pero hoy, iluminaremos una tarta para ti, y te desearemos, un muy feliz cumpleaños.