BLUE HOLE
Hoy os dejamos una antigua entrada de nuestro compañero Jorge Donato, él nos la dejo guardada en borradores y al empezar a revisar no nos gustaría que se perdiera, pero más que para la sección de miradas verdes, tal vez deberíamos decir, miradas azules. (Las fotografías originales han sido cambiadas ya que no nos aparecían en el borrador)
J.J.D.R
El Blue Hole de Dahab es un caso excepcional. Se trata de un enorme y bello arco de 26 metros de profundo y frío color azul. Su lecho marino, oculto a 120 metros de profundidad, alberga los cuerpos de más de cien submarinistas que perecieron al tratar de alcanzar el mar abierto.
En muchos casos la falta de experiencia y el mal equipamiento, y en otras ocasiones la excesiva confianza de los más expertos ha ocasionado la perdida de muchas vidas.
J.J.D.R
Un negro y temible abismo. Un hueco de muerte cercano a la playa.
La nada eterna bajo el inmenso peso de un mar azul y bello.
Un oasis desde el aire. Un paraíso fotográfico desde tierra. La meta de miles de submarinistas embebidos de ansia aventurera.
En el golfo de Agaba, en la península del Sinaí (Egipto), bajo un mar de dientes de tiburón, se haya horadado entre magníficos campos coralinos una enorme caverna en el estómago del mar de Dahab.
Estas cuevas submarinas son conocidas como “Blue Hole” y son numerosas en nuestros mares y océanos, siendo lugar predilecto para aficionados y expertos submarinistas.
The Grand Blue Hole at Coast of Belize. |
Estas cuevas submarinas son conocidas como “Blue Hole” y son numerosas en nuestros mares y océanos, siendo lugar predilecto para aficionados y expertos submarinistas.
El Blue Hole de Dahab es una trampa mortal. Una lengua de mar separa la playa del inmenso agujero. Los submarinistas han de sumergirse hasta los 60 metros para, inmediatamente, ascender en busca del mar abierto.
Pero la negra caverna desorienta a los intrépidos submarinistas que al no encontrar la entrada siguen descendiendo hacía las profundidades en búsqueda de una efímera salida, en vez de ascender y lograr su ansiada salvación.
Al continuar el descenso la falta de oxígeno hace mella en los buzos. Comienzan a sentir los efectos de la narcosis provocada por el nitrógeno. Se sienten mareados y desorientados y terminan por dejarse llevar hasta acabar en el lecho marino.
Un auténtico cementerio se oculta bajo la gigantesca montaña de agua. En diversas inmersiones hasta el fondo marino, se han podido filmar los cadáveres de los infortunados submarinistas.
Tenía experiencia y conocía del peligro del Blue Hole. Pero nada de esto sirvió para que salvase su vida. El 28 de abril del año 2000 se sumergió en la caverna llevando sobre su cabeza una cámara de vídeo. Sin conocerse bien los motivos, Youri se precipitó hacia las profundidades. En su rápido y mortal descenso, la cámara no dejó de grabar en ningún momento, mostrando incluso el instante en el que el joven llegó a tocar fondo a una profundidad de 91,5 metros .
La belleza de algunos lugares de nuestro mundo nos atrae vivamente. El hombre sueña con ascender la montaña más alta, llegar a los más recónditos parajes de la tierra, descender a las profundidades de mares y océanos e, incluso, explorar más allá de nuestra órbita terrestre.
La belleza de algunos lugares de nuestro mundo nos atrae vivamente. El hombre sueña con ascender la montaña más alta, llegar a los más recónditos parajes de la tierra, descender a las profundidades de mares y océanos e, incluso, explorar más allá de nuestra órbita terrestre.
El riesgo y la aventura es algo innato en nosotros, casi me atrevería a decir que diseñado genéticamente en nuestro ser. Esto nos hace intrépidos y, a veces, demasiados confiados de nuestras capacidades. La naturaleza, que en ocasiones parece quieta y dulce, dócil y sensible, nos embelesa con su belleza para cobrarse después su tributo de vidas humanas.
Gaia es inmensa y preciosa, a la vez que tremendamente dura y despiadada.
El siguiente vídeo, pertenece a la cámara que portaba Youri Lipski el día que murió.
Las imágenes muestran el acelerado descenso y los últimos momentos del submarinista, por lo que advierto de su dureza.
Pues realmente bello este Blue Hole, no me importaria darme una vueltina por allí jejeje
ResponderEliminarun abrazo amigo
Cuánta paz se respira.
ResponderEliminarHay lugares cuya luz y magia traspasa los límites de lo cotidiano.
un abrazo de luz