¡¡¡Felicidades Clara!!!
Hace mucho tiempo, en un bosque encantado, vivía un hada mágica que estaba aburrida de la fealdad del mundo, de la contaminación del aire, de las playas sucias, de los ríos en los que mueren los peces porque hay basura... El hada estaba tan aburrida, que decidió ir a jugar con su amigo el duende. El hada y el duende estaban jugando a las orillas de uno de los pocos ríos que quedaban sanos, cuando vieron a una pareja de enamorados, que se miraban a las orillas mientras jugaban con una niña pequeñita y de cabellos castaños. Candela, mójate las manos en el río- la decía su papá- vas a ver que el agua esta fresca. El hada y el duende se miraron y sonrieron, los dos, estaban pensando lo mismo, el mundo podía ser muy feo, pero siempre tendrían algo con lo que hacerlo bonito, el amor. Y ese amor, unido a un poquito de la magia del hada, y unas palabras cariñosas del duende, podían hacer cosas muy bellas. El hada y el duende, echaron un conjuro mágico a los enamorados, si