El TopTen para controlar a la gente tóxica

“El mayor enemigo de la libertad individual es el propio individuo” Saul Alinsky

El tema de los ambientes y las personas tóxicas es prácticamente inagotable.  Mantener a raya a la gente tóxica es importante porque permite expandirse y seleccionar mejores compañías. No significa encerrarnos en una burbuja, es elegir quienes serán nuestros influenciadores. El ser humano es un ser social por naturaleza, tanto en los conflictos como en las soluciones, siempre estamos en un contacto interpersonal. Así pues, esta es una guía de 10 tips relevantes.

1. Cambio intransferible. El primer tip es el más importante, nadie cambiará a menos que lo quiera hacer, nada más falso que la frase: “por ti voy a cambiar”. Aléjese rápidamente de una persona que diga esto. Mucha gente va por la vida cometiendo los mismos errores en serie y si consigue apoyo seguirá en la mala actitud y no cambiará, otros de llevar tanta leña en la vida se dan cuenta y esos sí cambian por convicción.
2. Los negativos empedernidos. ¿Cuántas veces nos hemos cruzado con personas que son capaces de convertir una solución en un problema? ¡Seguro que muchas! Este es el tipo de gente que nunca está satisfecha con nada, ni con nadie y hará todo lo que esté en sus manos para que usted se sienta mal, a eso se limita su pequeño éxito.
3. Escala de vibración. Es común encontrar personas en nuestros entornos que parece que hablaran en otro idioma (metáfora). Es ese tipo de gente que nunca coincide con uno por más que “le hagas un dibujito” sus respuestas son tan inesperadas como incomprensible. Es ese sensación perceptiva de mala vibra. No olvide que usted es el encargado de darle o quitarle poder a las palabras de los demás.
4. Meta clara. Ser asertivo en la elección de las personas que nos acompañarán en el camino hacia nuestros sueños. Lograr conexiones positivas, círculos virtuosos de crecimiento y enriquecimiento personal y espiritual para multiplicar nuestras capacidades al máximo, donde la relación sea siempre Ganar-Ganar en una misma acción, tú ganas y yo gano. El (La) único (a) que puede limitar las metas por alcanzar, es uno mismo.
5. El poder de escuchar. Sí, escuchar es hasta natural, tenemos dos oídos y una boca, entonces la proporción debe ser escuchar, cuando menos, el doble de lo que decimos. Y lo que decimos debe provenir de la reflexión de lo que escuchamos y de nuestros valores. Por ello nunca se recomienda tomar decisiones importantes en momentos de ira, la mayoría de las veces son malas decisiones.
6. Juzgar. Andar por la vida juzgando a los demás no es una buena práctica, engancharse con situaciones o personas negativas atrasan la evolución natural del ser humano, si alguien o algo del pasado está regresando es porque le permitimos ser parte de nuestras vidas. Tomar el control de la vida propia significa poder reflexionar para identificar los errores y los éxitos y tomar medidas propias en cada caso.
7. Lo aprendido para aprender. Lo mejor que se puede hacer con lo aprendido es usarlo para seguir aprendiendo. Algunos lo llaman experiencia, pero es más que eso, va sumado con desarrollo de una intuición creativa. Los pensamientos iguales se atraen, también las acciones (positivas o negativas) y las personas. Pero los diferentes se complementan, es como cuando una mujer solo encuentra en su vida hombres casados, existe un inconsciente que impulsa ese deseo, no hay duda que es complejo. Es un suiche inconsciente que debemos colocarle encima un foco de 600 vatios para hacerlo consciente y poder manejarlo.
8. Matemos al prejuicio. La mayoría de las personas creemos que escuchar es analizar lo que te está diciendo otra persona y preparar rápidamente la respuesta, y no, hacerlo de esa forma nos lleva a dejar de entender sólo una parte del planteamiento. Si ya llevamos un prejuicio a una conversación, inconscientemente sólo iremos a validar nuestro prejuicio, por todos los medios.
9. La mano extendida. La persona tóxica está en un proceso evolutivo, es alguien que sólo cree en sí mismo, hace de la envidia y el egocentrismo su fórmula de vida. Podemos extenderle una mano pero si esa persona no quiere superar su ego, debemos seguir adelante para no ser sus víctimas.
10. La confianza. Confiar en nosotros mismos es el inicio para confiar en otros. Es común a veces sentir o presumir sentimientos de culpa por no conectarnos con gente tóxica, que en ocasiones pueden venir disfrazadas de ovejitas inocentes con algunas virtudes que pueden arrastrar a otros en sus precipicios. Debemos buscar la conexión con personas positiva que nos ayuden a jugar en equipo por metas similares.

Vía: Inspirulina