El níscalo, lactarius deliciosus, rovellò
Uhmm, espero que no haya habido muchas víctimas con la recogida de hongos y setas.
A mí, particularmente, no me gusta ninguna. Si acaso, el champiñón, con su preparación con tomate, pimiento, jamón y poco más. Pero bueno, me gusta cogerlos.
También me gusta coger el níscalo, aunque comerlo pues como que no es una cosa que me apasione, para eso me como un trozo de jamón o de queso pero hay gente a la que les vuelven locos los hongos y setas de nuestros bosques y prados.
Hoy hablaremos sobre el níscalo comestible pero hay otras clases que no lo son y son muy similares a él.
Es muy común en nuestra geografía y claro, como somos tan iguales y tan diferentes al mismo tiempo, pues en cada sitio tiene un nombre distinto.
Se le conoce también como Rovellò, Rovellón, Rebollón de pino, etc. Da igual, el caso es que se coma.
El Lactarius deliciosus es una micorriza, esto quiere decir que para sobrevivir necesita de un árbol en cuyas raíces se hospeda, tomando sustancias elaboradas por éste a la par que ayuda a su vigor. En este caso, el pino se ve beneficiado por vivir en simbiosis con el níscalo de diversas maneras. Debido a la relación hormonal entre el hongo y la planta, las raíces encargadas de absorber los nutrientes permanecen mayor tiempo activas. El hongo, a cambio recibe hidratos de carbono y vitaminas de la planta para poder subsistir.
El nombre de níscalo procede de "almizcle". El níscalo -Lactarius deliciosus- es la seta más extendida por los pinares de Castilla y León y la más conocida y consumida, especialmente en el otoño, aunque se recoge ya desde agosto y dura hasta diciembre, dependiendo de la abundancia de las lluvias en esos meses. Debido a su fácil reconocimiento y a la abundancia de estas setas en los pinares húmedos, representa una de las más buscadas, recogidas y comercializadas en la región. El níscalo tiene un sombrero carnoso, de 6 a 12 cm de diámetro, entre convexo y deprimido, con bandas concéntricas oscuras, mientras la cutícula es de un inconfundible color anaranjado rojizo. Margen fino enrollado, que se extiende al crecer. Pie corto, de 3 a 7 cm de alto por 1 a 2 de sección, hueco, con manchas anaranjadas. Láminas apretadas, un poco decurrentes, de color asalmonado, que se vuelven verdosas cuando se rompen, volviéndose de un típico color cardenillo. Segrega un látex anaranjado característico, que es de color rojizo en la especie Lactarius sanguifluus. Tiene olor agradable y sabor un poco astringente.
Os traigo más cositas sobre él desde esta página:
http://www.aguaron.org/turismo/setas/rebollon-de-pino.html
Otra variedad que puede generar dudas es el Lactarius chrysorrheus, conocido como Falso níscalo, cuyo sombrero tiene mucho parecido con el Lactarius deliciosus, pero el látex blanco o amarillento sirve de identificación. Al recoger los rovellones hay que tener cuidado de no tocar las laminas para que no se oxiden.
Una buena receta puede ser esta:
INGREDIENTES PARA 6 PERSONAS - kilo y medio de niscalos o robellons grandes y sanos - 100 grms de aceite de oliva virgen - Un picadillo con tres ajos pelados y bastante perejil , que se puede hacer picándolo en la picadora
PREPARACION 1º Se limpian los níscalos uno a uno con un trapo limpio sacándoles la tierra que puedan contener . 2º En la plancha (o en su defecto en una sarten grande) se coloca una capa de niscalos con el sombrero para abajo, se rocian con un poco de aceite de oliva y se salan .
A fuego bastante fuerte se van asando, procurando darles la vuelta para que se guisen por todos los sitios .
Sacarlos y ponerlos en una fuente Acto seguido poner otra capa y hacer lo mismo hasta que todos los níscalos estén asados. Ya vereis como están riquísimos y realmente os parecerá que estais comiendo algún tipo de carne muy sabrosa.
A mí, particularmente, no me gusta ninguna. Si acaso, el champiñón, con su preparación con tomate, pimiento, jamón y poco más. Pero bueno, me gusta cogerlos.
También me gusta coger el níscalo, aunque comerlo pues como que no es una cosa que me apasione, para eso me como un trozo de jamón o de queso pero hay gente a la que les vuelven locos los hongos y setas de nuestros bosques y prados.
Hoy hablaremos sobre el níscalo comestible pero hay otras clases que no lo son y son muy similares a él.
Es muy común en nuestra geografía y claro, como somos tan iguales y tan diferentes al mismo tiempo, pues en cada sitio tiene un nombre distinto.
Se le conoce también como Rovellò, Rovellón, Rebollón de pino, etc. Da igual, el caso es que se coma.
El Lactarius deliciosus es una micorriza, esto quiere decir que para sobrevivir necesita de un árbol en cuyas raíces se hospeda, tomando sustancias elaboradas por éste a la par que ayuda a su vigor. En este caso, el pino se ve beneficiado por vivir en simbiosis con el níscalo de diversas maneras. Debido a la relación hormonal entre el hongo y la planta, las raíces encargadas de absorber los nutrientes permanecen mayor tiempo activas. El hongo, a cambio recibe hidratos de carbono y vitaminas de la planta para poder subsistir.
El nombre de níscalo procede de "almizcle". El níscalo -Lactarius deliciosus- es la seta más extendida por los pinares de Castilla y León y la más conocida y consumida, especialmente en el otoño, aunque se recoge ya desde agosto y dura hasta diciembre, dependiendo de la abundancia de las lluvias en esos meses. Debido a su fácil reconocimiento y a la abundancia de estas setas en los pinares húmedos, representa una de las más buscadas, recogidas y comercializadas en la región. El níscalo tiene un sombrero carnoso, de 6 a 12 cm de diámetro, entre convexo y deprimido, con bandas concéntricas oscuras, mientras la cutícula es de un inconfundible color anaranjado rojizo. Margen fino enrollado, que se extiende al crecer. Pie corto, de 3 a 7 cm de alto por 1 a 2 de sección, hueco, con manchas anaranjadas. Láminas apretadas, un poco decurrentes, de color asalmonado, que se vuelven verdosas cuando se rompen, volviéndose de un típico color cardenillo. Segrega un látex anaranjado característico, que es de color rojizo en la especie Lactarius sanguifluus. Tiene olor agradable y sabor un poco astringente.
Os traigo más cositas sobre él desde esta página:
http://www.aguaron.org/turismo/setas/rebollon-de-pino.html
Otra variedad que puede generar dudas es el Lactarius chrysorrheus, conocido como Falso níscalo, cuyo sombrero tiene mucho parecido con el Lactarius deliciosus, pero el látex blanco o amarillento sirve de identificación. Al recoger los rovellones hay que tener cuidado de no tocar las laminas para que no se oxiden.
Una buena receta puede ser esta:
INGREDIENTES PARA 6 PERSONAS - kilo y medio de niscalos o robellons grandes y sanos - 100 grms de aceite de oliva virgen - Un picadillo con tres ajos pelados y bastante perejil , que se puede hacer picándolo en la picadora
PREPARACION 1º Se limpian los níscalos uno a uno con un trapo limpio sacándoles la tierra que puedan contener . 2º En la plancha (o en su defecto en una sarten grande) se coloca una capa de niscalos con el sombrero para abajo, se rocian con un poco de aceite de oliva y se salan .
A fuego bastante fuerte se van asando, procurando darles la vuelta para que se guisen por todos los sitios .
Sacarlos y ponerlos en una fuente Acto seguido poner otra capa y hacer lo mismo hasta que todos los níscalos estén asados. Ya vereis como están riquísimos y realmente os parecerá que estais comiendo algún tipo de carne muy sabrosa.
Menuda pedazo informacion. Estan riquisimos, lo que ocurre es que por lo menos en Cataluña suelen ser carisimos
ResponderEliminarUn abrazo
OHHHHHHHHHHHHH!!! se me hizo la boca agua!!! qué ricos!!!
ResponderEliminaraquí en Mallorca se organizan escuadrones busca setas !!!
abrazos!
Por el título, me pregunta de qué se trataría, y ahora me voy con unas ganas de comerlos...
ResponderEliminarBesos y feliz inicio de semana.
Da gusto pasarse por aquí y ver siempre los beneficios de la Hermosa Naturaleza que, a veces, la Mayor, tenemos tan denostada y despreciada...Lo es Todo.
ResponderEliminarAbrazos Amigos.
Simplemente deliciosos!!!! Me encantan!!!
ResponderEliminarUn abrazo y genial la información!!!
Me gustan las setas a rabiar, hasta los champiñones; pero no me atrevo a recolectar ninguna porque no las diferencio. Todo lo que hago es comprarlas en el mercado cuando las hay.
ResponderEliminarBesos.
Para los que viven en zonas donde realmente hay polucion,contaminacion ambiental y centrales..etc..
ResponderEliminarTodos los expertos de estos temas lo saben, las setas es uno de las mallores especies a evitar consumir, es una verdadera esponja de germenes, metales, toxicos e incluso radioactividad ambiental. Las setas no son malas, como el pescado tampoco, pero hoy en dia estos alimentos escasas veces los puedes recojer sin trazas de toxicos.
Si, el sabor que tienen son una pasada, pero yo personalmente los recojo en zonas de las que me he informado anteriormente por estudios biologicos, nunca comerciales.
No hay que alarmarse, pero tampoco pecar de que son los mas sanos, adecuados y que se tengan que consumir amenudo, en este caso son potencialmente lo contrario.
Mis suegros que son de un pueblecito de Cuenca estan muy puestos en este tema, sobre todo el y eso de salir al campo a rebuscar uff lo tienen ya resabido jiji... a mi las setas no me motivan pero el champiñon uhhmmm me encantaaaaaaaaaa!!
ResponderEliminarBesitos y feliz semanita :)
Anda que no he cogido yo de estos alli en el pueblo, jejeje pero es que luego llegabas a la lumbre, despues de lavarlos los ponias sobre las ascuas y j.... er que no estaban ricos ni ná, ahora ya como por la zona tienes que tener licencia y scarte un permiso y pagar por pasar con el coche, jajjaj comeremos setas del carrefour ajjaaj
ResponderEliminarun abrazo compi
Holaaaa: Con lo que me gustan!!!! Ahora tengo ganas de hacer la receta ; )
ResponderEliminarBuenísima la entrada =)
Besitos >.<
Creo que yo tampoco me fiaría de cogerlos del campo, aunque tampoco es que me gusten mucho jajajaja. Un besazo.
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