SECUOYA

El descubrimiento de la Sequoia de California como nueva especie botánica tuvo lugar en 1794 siendo su descubridor el científico escocés Archibald Menzies (754- 1842). En 1840 se introdujeron las primeras en Europa,  (San Petesburgo), y tres años después llegaron a Inglaterra.

El género Sequoia, toma su nombre de Sequoyah (1740-1843), el nieto de un jefe Cheroqui,  al que se le atribuye la invención de un  alfabeto  de su pueblo .Un rudimentario pero eficaz sistema de escritura para la época.

La hija del susodicho jefe contrajo matrimonio con un alemán y  Sequoyah  con el tiempo acabaría convirtiéndose en un trampero de Georgia, al este de Estados Unidos.

A pesar de ser <<Sequoia>>  el nombre científico más antiguo, los botánicos ingleses decidieron en 1853 cambiarlo por Wellingtonia dedicado a su famoso militar, pero lógicamente los botánicos americanos no entusiastas de esta idea, pensaron que si se iba a dedicar al honor de un gran soldado este debía de ser Jorge Washintong y le denominaron Washingtonia en 1854. 

Estos nombres vulneraban las reglas científicas de los más puristas y se ha vuelto a llamar Sequoiadendron  giganteum , nombre puesto por el eminente botánico americano John T. Buchholz. Por supuesto que otros científicos siguen todavía hoy erre que erre.

La Secuoia es uno de los gigantes del reino vegetal . Puede sobrepasar los 100 metros de altura. En España nos conformamos con algo más bajito pero aun así impresionante como las de la Granja de San Ildefonso en Segovia.

Hay múltiples leyendas y anécdotas sobre este árbol. Dibujos antiguos y grabados más o menos fantásticos , Fotografías con túneles que atravesaban diligencias y automóviles .Los mas grandes si es cierto que son de una talla fabulosa . Se dice que de la cepa de uno de ellos se construyo una pista de baile donde danzaban con facilidad 32 parejas.

Tal vez lo más sorprendente de las secuoias, aún más que sus dimensiones y sus edades, es su sistema de reproducción. A los dos años de madurar las semillas empiezan a caer de las ramas durante incluso 20 años. Ningún botánico se atreve a explicar  que lleva a las semillas de la secuoya a liberarse explosivamente y diseminarse.  Pero la respuesta la tienen los indígenas quienes dicen  que cuando pasean cantando por el bosque docenas de piñas le responden y acompañan a modo de coro siempre.

Al mas puro estilo de sus antepasados, Laurinda Reynolds, una contadora de historias tsalagi, cede la palabra a las secuoyas gigantes para que ellas mismas nos expliquen:

A ver que pongo voz solemne .

<<Todo se reduce a crecer en armonía. Crecemos de forma armónica tanto en lo alto como en lo bajo, y armonizamos el exterior con el interior. También crecemos en armonía con el tiempo. Hoy nos valemos de lo que preparamos ayer, en la última estación, incluso el año pasado.  Hoy nos preparamos para mañana, para la próxima estación e incluso para los años que han de venir.  Armonizamos el pasado con el futuro a través de lo que hacemos en el momento presente.

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