PARA CANDELA, LA HIJA DE AMELIA.

BUENO, ESTO ES PARA QUE AMELIA SE LO CUENTE A CANDELAS, DE PARTE DE TODOS LOS SEGUIDORES DEL BLOG.

Candela es una niña alegre, simpática y muy buena.
Un brujo le tenía envidia, quería robarle una de las cosas que más alegres ponía a sus papis y amigos, su voz.


Con su voz les daba paz y amor, se sentían felices con ella, con sus risas, con su cantar hablando.


Pero el brujo tenía un plan, se disfrazó de médico y operó a Candela, diciendo que había que extirparle las amígdalas.


Candela perdió la voz, se puso  malita y sus padres y amigos se pusieron todos muy tristes.
Al verlos así, Candela se ponía peor, quería hablar pero no le salía la voz, no podía decir con su mente lo que su boca no podía contar.


El brujo se presentó en la casa de Candela y se rió ante ella, cuando no estaban sus padres y Candela lloró, impotente, no podía gritar ni hacer nada, solo llorar.


-Y ahora le quitaré la voz a tus padres, no podrás escucharlos tampoco.-dijo el brujo riendo.


Al escuchar esto, Candela ya no pudo aguantar más, una extraña fuerza se apoderó de ella y gritó, gritó un gran 
NOOOOOO.


El brujo, se asustó y al escuchar de nuevo la dulce voz de Candela, se esfumó, desapareció.


Cuando los padres de Candela entraron por la puerta, Candela estaba cantando, feliz y contenta, soriendo y en paz.


Había derrotado ella sola al mal.